El pasado 8 de marzo del 2019 se aprobó el Decreto Ley que obliga a las empresas a llevar un control horario de la jornada laboral. El origen del decreto reside en la necesidad de demostrar las horas extras trabajadas en visión de luchar contra la precariedad laboral.
“La empresa garantizará el registro diario de jornada, que deberá incluir el horario concreto de inicio y finalización de la jornada de trabajo de cada persona trabajadora, sin perjuicio de la flexibilidad horaria que se establece en este artículo.” Art. 10.
A muchas empresas les supone un problema conseguir un sistema de registro que cumpla con los requisitos de la Ley y a la vez se adapte a sus necesidades, como el número de trabajadores, el presupuesto, etc.
Para elegir la mejor solución de las miles que podemos encontrar en el mercado, es preciso conocer bien cuales son los requisitos establecidos por este decreto.
A pesar de la obligatoriedad de registro no se ha impuesto un método único para realizar esta tarea. Por tanto, la selección del método y la fiabilidad de éste quedan a cargo de la empresa. En principio bastaría con realizar el registro escrito y firmado a mano, pero esto conlleva destinar tiempo y personal para su control, además de no ser la manera más fiable ya que hay que tener en cuenta posibles incidencias, bajas por enfermedad, días no trabajados, vacaciones, etc.
Por ello, el sistema más fiable es llevar un registro automatizado, que permita su control, y que haga posible la exportación de los datos que faciliten la tarea al departamento de RRHH de las empresas. En el mercado podemos encontrar diferentes sistemas para automatizar esta tarea. En este caso vamos a hablar de aquellos que sólo están destinados a registrar las entradas y las salidas, y no aquellos que a su vez permitan el acceso a zonas de trabajo, despachos o edificios.
En primer lugar están las opciones de registro más económicas que funcionan sin ningún tipo de cableado o conectividad pero que posteriormente requieren de la descarga de los datos de forma manual. Aunque tienen lector de tarjeta o de código también suelen limitar el número de usuarios que puedan estar registrados, no terminando de ser la mejor opción.
De los más sencillos, saltamos a las opciones de sistemas biométricos. Son sistemas más complejos y por lo tanto, más caros. Suelen tener conectividad via WIFI o cableado y su precio varía en función del número de usuarios que se puedan dar de alta en el sistema y la cantidad de veces que estos puedan “fichar”. El problema de los sistemas biométricos es que deben ser buenos para que funcionen sin incidencias. La lectura de la huella dactilar no es siempre fácil, la suciedad en las manos o el sudor pueden impedir que funcionen con normalidad. Otro inconveniente de estos sistemas, es que las huellas dactilares están consideradas datos sensibles, por lo tanto hay que manejar esa información de acuerdo a la Ley de Protección de Datos actual.
La marca Ealloora es una empresa de soluciones IoT que ha creado un dispositivo para hacer fácil el registro horario. Este producto, Pass, es un lector de tarjetas que registra las entradas, las salidas y la duración de la jornada en tiempo real a través de una plataforma Web App.
Este dispositivo cuenta con una tecnología innovadora que lo hace autónomo y que no requiere conectarse a la red eléctrica, a la red WIFI, o el uso de tarjetas SIM o Bluetooth. Es un sistema que puede colocarse sin instalación donde sea más conveniente y que permite ver los datos en tiempo real a través de la Web App.
Si quieres más información sobre este producto, puedes visitar la página web de Ealloora